Por vacaciones, trabajo o compromisos personales, cuando estas de viaje resulta bastante complejo ajustarse a un plan de alimentación, pues no siempre contarás con todo lo necesario para tu dieta. Por ello, quisimos simplificarte las cosas con algunos tips que pudieran ser útiles en el momento de elegir que nos conviene más y así no arruinar todo el esfuerzo.
1. Si viajas en avión:
Preocupate de la hidratación. Estudios han demostrado que durante un vuelo se tiende a perder agua principalmente por dos factores: la presurización de la cabina y el consumo de bebidas alcohólicas y café. Es por esto que el tomar agua durante y después de bajarse del avión es sumamente importante, sobre todo si quieres que tu función mental y humor estén al 100 en tus próximas juntas.
Por otro lado, que lo que consumas durante el vuelo no exceda lo que normalmente ingieres en un día cualquiera de dieta. En los aviones muchas veces es imposible conseguir productos sanos y bajos en grasas e hidratos de carbono. Encárgate de elegir bien: agua mineral sin gas, te de hierbas con endulzante (lleva el tuyo, en los aviones siempre usan apartartame), postres en base a fruta que puedes guardar para mas tarde, snacks de frutos secos si fuera necesario.
2. No saltarse ninguna comida:
Lo ideal es que no pases más de 3 horas sin comer, ya que esto hará que no llegues a tu próxima comida con mucha hambre y por ende comas en exceso. Además, tus niveles de energía se mantendrán a raya para soportar un largo día de juntas, eventos y recorridos turísticos. Intenta cenar ligero para que la digestión no afecte tus horas de sueño. Si es posible intenta conseguir fruta fresca, jugos en base a aloe vera sin azúcar, agua de coco, frutos secos y semillas. Evita las barritas de cereal, generalmente contienen mucha azúcar que no necesitas a no ser que lo que quieras sea entrenar y ganar resistencia sin importar la ganancia de peso.
3. Tu desayuno es lo principal:
Encárgate de comer bien a primera hora del día, de esta forma evitarás sentir hambre durante el día y aminoras la posibilidad de salirte del plan. Además, te dará la energía necesaria para empezar tu jornada. Elige productos integrales, fruta fresca y proteínas bajas en grasa, mejor aún si le agregas a ese sandwich vegetales como lechuga, tomate y brotes.
4. Evita los excesos:
Por lo general el cambio de horarios altera los ritmos naturales del cuerpo, esto causa que tu cerebro mande otras señales relacionadas al hambre. Siempre podrás elegir las opciones saludables, modera el consumo de grasas, azúcares, sodio y alcohol. Intenta cubrir tus raciones de frutas y verduras, opta por cereales altos en fibra y no te sobre alimentes. No hay excusa, en todo el mundo existen estos alimentos.
5. Mantente activo:
Los beneficios del ejercicio también se ven reflejados durante un viaje o vacaciones, ya que te ayudarán a mejorar el sistema circulatorio y a mejorar el desfase de horarios que tu cuerpo presenta. Camina por la ciudad que visitas, utiliza las escaleras o bien ve al gimnasio de tu hotel, sale a caminar a la playa, quizás hasta te animes a un trote suave. mantente activo, ya sea en una ciudad, en la montaña o en la playa, siempre existe el momento para realizar algo de ejercicio.
6. Cuídate del buffet:
Muchas personas ven el buffet como el lugar para probar y comer de todo. ¡No abuses de este servicio de alimentos! Por lo general la comida que se ofrece es alta en calorías, pero recuerda que también hay opciones saludables que te darán saciedad y beneficiarán tu salud. Si aun así te tientas prueba elegir un producto al día que te guste y que no necesariamente va en tu dieta. consúmelo temprano, reemplazando por algo similar. Por ejemplo: si mueres por probar algo dulce quizás te convenga cambiar las tostadas, acompañarlo de un jugo de frutas sin azúcar y un café. Lo amargo sella los sabores por lo tanto es el punto final al desarreglo. Si por otro lado la tentación es por comida, puedes en este caso dividir tu plato en 3, en donde la mitad será ensalada, 1/4 de tu plato será desarreglo y el otro 1/4 será proteína. otra cosa importante: siempre el desarreglo será al almuerzo, nunca a la cena.
7. Ayunos detox:
Finalmente, si fuera que te saliste de todo esquema existe otra opción que te podría resultar útil: batidos verdes y consumo de frutas cítricas. Limpiar tu organismo consumiendo solo frutas cítricas y verduras de hoja por un día te ayudará a eliminar toxinas y reorganizar tu plan de alimentación. Eso si, siempre es conveniente consultarlo con tu Nutricionista.